sábado, marzo 22, 2008

Mis fallas

No pretendo hacer una crónica de esa semana fallera. Tan sólo me apetece dejar constancia escrita de algunas cosas que me han pasado, y que ha hecho de estos dias algo muy especial.

14/3 - A pesar de ir contrarreloj, de las prisas, de pasar todo el dia en el taller acabando los ultimos detalles, de los contratiempos con el transporte, de los nervios y el cansancio, nuestra plantá fue una experiencia estupenda. Alrededor de tres horas tardamos en montarlo todo, al principio habia mucha gente de la comisión y casi no dejaban trabajar. Luego se fueron yendo a dormir y todo fue como una seda. Me sentí como el jefe del grupo, todo se iba haciendo según mis indicaciones, a pesar de estar también mi hermana y una amiga suya que nos echó más que una mano. Se estaba haciendo realidad nuestro sueño de los últimos meses.

15/3 - Hicimos fotos de la falla de dia, para dejar constancia gráfica antes de que pudiera perderse cualquier parte de la misma, como así ocurrió después (el viento se llevó los carteles). Comimos en un japonés y luego fuimos a ver plantá de otras fallas.
Por la tarde me llegó la noticia: nos habian dado el 4º premio. A pesar de llevar más presupuesto que otras fallas que quedaron por encima de nosotros, mi primera reacción fue decir: "está bien". Según han pasado los dias he valorado más aún ese premio, teniendo en cuenta que somos nuevos, que era nuestra primera falla y que un premio es un premio. De 21 fallas sólo se llevaron premio 7 de ellas, y el 4º fue para nosotros. Está realmente bien!
Por la noche, en la plantá de un amigo mio hubo problemas, y sin quererlo me metí de lleno en ellos. Habia que traer piezas desde el taller, a unos 140 km de Valencia, el convoy lo llevaba mi mejor amiga, SHL, junto con otro chico. Pero al poco de salir de allí les paró la guardia civil por un problema con el remolque. Resultado: 150 € de multa y dos puntos menos en el carnet de mi amiga. Para colmo la furgoneta que llevaban se quedó sin bateria y no arrancaba. Llamada de auxilio a la que acudí sin pensarmelo apenas. Un camión iba hacia allí desde Valencia para recoger las piezas, pero ellos no podian ir en él, asi que necesitaban a alguien que les llevase a casa.
Al llegar les ayudé a desmontar las piezas del remolque, con la suerte de que llevaba en el maletero del coche el material de mi plantá del dia anterior, que vino de perlas para la ocasión. Me sentí realmente útil, me demostré a mi mismo lo que soy capaz de hacer por una amiga en apuros, aparte de sentirme reconocido en mi labor fallera. SHL habia pasado un dia horroroso, y aunque no mitigara sus males, sólo el saber que acudía hacia allí la hizo respirar.
Luego de broma le decía que cómo iba a perderme yo aquello...

16/3 - Dos cosas a destacar de este dia: la visita de una amiga reciente junto a su madre, a ver mi falla. Me hizo sentir agradecido que quisieran ir a verla, y para conocerlas de hace poco tiempo, y en unas circunstancias muy poco deseables para ambas, su interés es algo que me congratula mucho.
Por la noche nos invitaron a mi hermana y a mi a cenar en la falla. Después llamé a SHL y la noté desanimada por lo de la noche anterior, asi que me puse caborro e insistí en sacarla de casa. Para mi sorpresa, mi hermana hizo lo propio, con lo cual ya no pudo negarse. Le dimos un paseo a ver fallas que ella agradeció.
Me siento buen amigo con cosas como esta, o como la de anoche.

17/3 - Nada especial, muchos paseos falleros, visitas, compras, y una escapada nocturna con amigos.

18/3 - Coincidimos con un amigo artista de infantiles con el que competiamos y que quedó justo un puesto por debajo de nosotros. Decidimos que hoy el paseo lo dariamos juntos, pues tenemos gustos afines en materia fallera. Una tarde muy interesante en buena compañía. Por la noche vi el último castillo de fuegos de las fiestas, de los demás no vi ninguno. Al acabar llamé a SHL que iba con un grupo de amistades comunes. Para no dejarme solo entre la marabunta de gente, se acercó a mi dejando a su grupo, mientras yo trataba de llegar hasta donde estaba ella, hablando con ella por el móvil mientras. Quizás sólo fue por estar cansada de cierta compañia de ese grupo, pero a mi me hizo sentir bien que me esperara y les dejara a los otros a su marcha. Dimos una vuelta y acabamos viendo mi falla.

19/3 - El cansancio era más que evidente ya, pero no quise dejar de acudir a la Plaza del Ayuntamiento a vivir la última mascletá. Este año he visto menos que nunca, y sabia que la del dia de San José mereceria la pena, pues la disparaba el mejor pirotécnico en activo hoy en dia: Vicente Caballer. No me equivocaba, su mascletá vino a compensar mi ausencia en las otras, un disparo impresionante, perfectamente acompasado, ruidoso pero con cadencia, increscendo continuo, y un final múltiple con terremoto terrestre giratorio y final aéreo apabullante. No pude reprimir un ataque de euforia compartido con la gente de mi alrededor, fue algo espectacular. Sabia que no me defraudaria, lo sabia! Estaba roto por el cansancio de tantos dias de paliza, pero esa mascletá lo compensó todo.
Por la tarde paseo, despacito eso si, a ver las ultimas fallas que nos interesaban. Y por la noche acudí a ver quemar mi falla. No sentí lástima, lo llevé bien. Ya lloró la fallera mayor infantil, nada más verla me dijo, con voz lastimera: "Unelko.. se va a quemar!" Pobrecita mia...
Y luego mi hermana y yo vimos quemar algunas fallas grandes, gracias a que nos movimos en coche, y a que me conozco bien la ciudad, y los lugares donde sé que puedo llegar rápidamente, y puede haber una cremá interesante. Conseguimos ver hasta cinco distintas, hasta que a las 2 de la mañana nos fuimos a casa y caimos como losas sobre la cama.